Si cada año transcurrido en Bitácora Vertical, fuese un número de una revista editada por Hugh Hefner, siempre habría una sección dedicada a Quirós. La recurrencia será cansina para algunos, pero otros, quizás acaben de convencerse de conducir sus pasos hasta allí, y entonces puede que, si surge la chispa y hay suerte, tras una buena tarde escalando metidos en una postal, acaben corriendo cuesta abajo destino a Aciera para asistir, cobijados en la terraza del Sol' Horrin, al espectáculo de la lluvia en Asturias, agarrados a una merecida cerveza y un buen bocata de cecina de León. Para entonces quizás ya hayan sucumbido al hechizo de Quirós.
En este Valle tengo todo lo que necesito para ser feliz. |
Yo ya hace años que descubrí el paraíso; me llevó allí Jonás Cruces cuando aun no timoneaba su empresa "Todo Vertical" y, solo por eso, le estaré agradecido siempre. Yo también he llevado allí a otra gente, a amigos, a mi queridísima María y desde hace años ya no es sólo mi lugar sino también el lugar de Gema y Pepa, mi familia elegida.
Con los años me he vuelto más precavido en las relaciones humanas y más egoísta. No quiero que nada cambie allí, ya no quiero que nadie más comparta el hechizo, si no va nadie... mejor... Pero todo el mundo sabe que es imposible callarse las grandes pasiones y eso es lo que siento cada vez que aparco en las Agüeras y contemplo el Hórreo que recorta el Pico Mayor y las montañas que sustentan las paredes de escalada ¿Cómo mantener el pico cerrado?
A veces amenazaba lluvia y había que guarecerse bajo el hórreo de Las Agüeras |
Todo el mundo se encuentra aquí agustito. |
Las vías:
-El Escalón: tres largos, V+/6b+/V, el primer y tercer largos ya los había encadenado en 2011. El segundo, reequipado por nuestro amigo Manuel había quedado pendiente hasta hoy. La vía tiene ambiente de principio a fin. Creo que una vez la hice de un tirón hasta la tercera reunión con una cuerda de 80 metros... (y luego la rapelé hasta el suelo en dos tramos) Pero la memoria es frágil y esta información debe considerarse con todas las reservas. En todo caso, en esta ocasión ensamblé los dos primeros y rapelé desde esta reunión a la primera.
El 2ª largo, el duro, tiene los seguros bien puestos y se pueden acerar si fuera necesario ¡Cuanto te debemos Manuel!
-La Placa Torres, 6c. Esta gran vía me dejó un sabor agridulce, al tercer pegue con buenos alargues en los pasos clave, la hice sin parar hasta la reunión. En el pegue definitivo cosí un alargue de dos cintas en una de las últimas chapas, pasado ya lo más duro. La considero encadenada, pero con mala ética y se que la repetiré para limpiar mi conciencia.
La Corner, a día de hoy, inalcanzable. |
Ampliando el conocimiento del terreno:
El año pasado dejamos "interruptus" nuestro intento de ascensión al Picu Mayor, y las cuentas pendientes en estos temas las llevamos fatal. Así qué, espoleados también por nuestra inminente incursión en Picos, quisimos probar nuestras piernas ascendiendo a esta impresionante cima que preside Valdemurio.
Nuestra idea esta vez, era intentarlo saliendo como el año pasado, desde Villaorille, pero esta vez rodeando la sierra dirección a Toriezo y regresando a las Agüeras por el otro lado de la sierra, por terreno ya conocido.
Gema posa ante el Picu Mayor o Gorrión |
Logramos el objetivo principal, la cumbre del Gorrión (nombre por el que es conocido esta montaña por los no-locales). La cumbre nos supo especialmente bien porque a pesar de su fácil acceso, es muy aérea y las vistas espectaculares... Lamentáblemente me dejé la cámara y sólo los móviles registraron nuestro paso para la posteridad..
No teníamos claro como enlazar con la ruta que dejamos el año pasado en la Braña de Quintaneiro así que como él día amenazaba lluvia y estábamos más que satisfechos, volvimos a Villaorille retrocediendo sobre nuestros pasos. En la cima, el altímetro marcó una diferencia con nuestro campo base cercana a los 1000 metros de desnivel.
Picos de Europa:
Quirós es nuestro pueblo de adopción, pero puestos a ampliar horizontes, también hemos adoptado una cordillera, probablemente, la más bonita de España, la de Picos de Europa.
Picos sería otra de las secciones fijas de esta revista de confección anual.
"El Sota", nuestro amigo de las Colladinas de Collado Jermoso, nos esperaba en Poncebos acompañado de su amigo Luís, al que no habíamos visto hasta entonces, y a quien esperamos volver a ver muchas veces.
Sota nos había preparado una ruta dura y llamativa: Partir de Poncebos, hacer el Cares y, poco antes de llegar a Caín, subir hasta el refugio de Vega Ario por la Canal de la Trea, comer y bajar por la Canal de Culiembro.
Nosotros teníamos serias dudas de nuestras aptitudes para la ruta, básicamente porque este año en lo relativo a andar, no hemos hecho ni el huevo, y por otro lado, porque la Trea arrastra una fama de dura, que excede de sus 1.200 metros de desnivel
De camino a Caín yo no lo veía claro, hacía algo de frío y mis sensaciones no eran nada buenas. Durante una hora pareció que la gran ruta proyectada se iba a limitar a completar el Cares, pero al salir el sol mi cuerpo se entonó y mis expectativas cambiaron. En cuanto al resto del pelotón, decir que cuando Gema pilla un ritmo no lo suelta y que el Sota y Luís eran motos que fingían ser bicicletas para no romper el grupo durante la ascensión.
Luís, Gema, Sota y Pepa junto al poste que indica el devío a la Trea |
Fuente del Peyu, único punto con agua dentro de la Canal de la Trea |
En la ascensión desde la Ruta del Cares hasta la parte más alta de la Canal habremos ganado 1200 metros. |
Después de un par de horas, el extremo superior de la canal está al alcance de la mano |
Por fin, estamos arriba. Nos queda un paseito hasta Vega Ario. |
Luís y Sota son dos tíos de puta madre sin su ilusión ni lo hubiéramos intentado |
Cerca de Ario, una expedición de espeleólogos habían instalado su centro de operaciones. Desde aquí ya olemos la cerveza del Refugio. |
Por ahí debíamos andar cuando nos rescató el helicoptero hará unos añitos. |
Cumpliendo con los protocolos hídricos y alimenticios de rigor. |
Después de comer gran parte de lo que llevábamos, tomarnos la merecida ronda de cervezas, y la segunda y necesaria (en nuestro caso) de Coca-Cola para recuperar los niveles de azúcar, nos pusimos en marcha con dudas sobre si daríamos con la Canal de Culiembro.
Un poco más a la izquierda de donde señala Sota, empiezan los hitos que nos bajarán a Culiembro. |
Tras algunos momentos de duda, El Sota hizo valer los galones y abandonamos la ruta hitada para tierar en línea recta hasta las casas y construcciones que conforman los Invernales de Ostón, donde está ubicado el poste que indica el principio de la Canal de Culiembro.
El descenso por la Canal de Culiembro es sencillo y se puede hacer a buen ritmo |
Canal de Culiembro. |
Ruta del Cares |
Sota marca un ritmo tan endiablado que solo podemos chupar rueda... Poco a poco, como ciclistas en La Vuelta a España, nos vamos descolgando y buscamos nuestro propio ritmo...pero nunca nos perdemos de vista.
Cuando llegamos al bar, comprobamos que hemos estado más de 10 horas de actividad. Estiramos un poco y procedemos a hacer los honores a un merecido tercer tiempo. Pepa está derrengada, pero estamos seguros de que se lo ha pasado a lo grande. Todos hemos tenido mucha suerte de que el sol no llegara en ningún momento a apretar con fuerza.
Finalmente nos despedimos en el aparcamiento del funicular, las despedidas son tristes, pero esto es solo un hasta luego, supongo que hemos iniciado una tradición que repetiremos muchas veces, Sota arroja el guante: "La próxima la Canal del Vidrio"... ¿Quién sabe?
Tras el palizón sopesamos varias alternativas, incluso la de volver ya a Madrid. Hacemos bien en descartarla. De regreso a Quirós lucho contra el cansancio para no despistarme en la carretera. El trayecto se me hace larguísimo.
El domingo, a nuestro ritmo, iniciaremos el retorno a Madrid y a nuestras obligaciones habituales. El año que viene volveremos, probablemente duplicando el número de días y con un guión abierto y parecido... Como la estructura estable de la revista de Hefner.
Rota de contenta |